Desquitando la quincena

Nadie, absolutamente nadie te paga por el trabajo físico que haces en la oficina-- llegar temprano, tomar nota, contestar correos, llamarle a los clientes, organizar juntas, hacer presentaciones.

es el acto de hacer las cosas que no tienes ganas de hacer...

es tu habilidad para manejar a los clientes enojados...

es tu capacidad de imaginar lo que nadie ha diseñado...

es el valor para ejecutar las ideas que te dan miedo.

Solo por eso recibes un cheque. Desquítalo.

Manuel Molina

De 1993 a 1997, como directivo en InfoSel, formé parte del equipo que desarrolló la primer red de acceso a Internet en México, instalando nodos de acceso y oficinas comerciales en 32 ciudades del país. Desde entonces he dedicado mi vida a investigar las formas en que la tecnología influye en el comportamiento humano.

Estoy particularmente interesado en redes, plataformas y protocolos con el potencial de:

1) Ampliar el acceso al conocimiento (educación, aprendizaje, análisis de datos, nuevas ideas)

2) Ampliar el acceso al capital (sistema financiero actual, crypto, capital humano, infraestructura tecnológica)

3) Ampliar el acceso al bienestar (salud, wellness, comunidad, entretenimiento, diversión)

Más acerca de mi aquí: https://www.sailorseven.org/acerca

https://sailorseven.org
Anterior
Anterior

Dura realidad

Siguiente
Siguiente

Se liberó de todos sus miedos