El camino hacia adelante
El enojo te impulsa hasta cierto punto, hasta que eventualmente te destruye.
La envidia te prende, te echa a andar, hasta que tarde o temprano desaparece.
Y la avaricia pareciera ser la mejor opción, hasta que te quita la paz y tu felicidad.
No te equivoques. El único camino hacia adelante es la curiosidad, la generosidad y la conexión entre nosotros mismos.
Son y siempre han sido las mejores herramientas que tenemos para mejorar las cosas.